RESEÑA – EL REY LEÓN (2019)

RESEÑA – EL REY LEÓN (2019)

17/07/2019 0 Por Lalo Olivares

Una de las películas más aclamadas en la historia de Disney vuelve porque… porque Disney dice que necesita hacerle un remake que parece live action pero que no es live action (por obvias razones), el cual continúa con esta tendencia de Disney de recrear sus películas clásicas y llegar a un nuevo público a su vez que ataca la nostalgia de los que ya las conocen. Así qué, ¿qué hay de nuevo en esta versión del Rey León? Ahora lo sabremos.

Simba es un cachorro de León africano que vive en todo un reino animal gobernado por su padre Mufasa, donde todos los animales viven en paz y siguiendo una cierta armonía casi que utópica. Pero el hermano de Mufasa, Skar, nunca ha estado de acuerdo con que él no pueda ser el rey y será capaz de todo con tal de obtener el reino.

Si a estas alturas, la historia se te hace familiar, es porque efectivamente, es la misma historia, pero tal vez pienses “bueno, pero seguramente no es exactamente igual, al menos cambiaron un poco el modo de contarla” y la respuesta es que no, la película es un 90% una calca de la versión clásica, lo cual ¿podría sonar como algo bueno, no? De menos que hayan respetado la película que tanto nos gusta… pues tampoco, porque te deja con sentimientos encontrados al no ofrecerte nada nuevo y a la vez, al diluir la esencia de lo que los personajes nos aportaban.

No es que luzcan mal, pero los personajes no logran transmitir las mismas expresiones y emociones, por obvias razones de que están hechos con base en animales reales, entonces al ver una escena donde deberían estar cantando pues… resulta algo extraña. Otro factor es que algunas escenas icónicas fueron diluidas o de plano omitidas, como la canción de “quiero ya ser el rey” donde por lo mismo no podemos ver un gran espectáculo con colores y diversión, vamos que hasta la película más reciente de Aladdin tenía más emoción en la escena de la canción del príncipe Alí. Pero bueno, esto con la intención de darle un sentido más “realista”, lo cual te deja con una sensación de vacío muy extraño, sobre todo con aquellas partes omitidas como el baile de timón o zazu cantando que tiene un monton de ricos cocos.

Las actuaciones no son malas, realmente las canciones son muy fieles a lo que ya conocemos y las interpretaciones están muy bien hechas, el único detalle es que Beyonce actuando suena muy exagerada y te saca un poco de onda de momentos. Se agregaron algunas motivaciones innecesarias a Skar, algunas adiciones a nala que le dan más sentido a su personaje y en general una animación sorprendente. Realmente no parecen hechos por computadora.

En conclusión: Esta nueva versión del rey león tal vez si llegue a aburrir a algunos niños, tal vez a otros les parezca entretenida y para los más grandes que crecimos con la versión animada, nos dejará con una sensación de que le hizo falta más carisma, esa chispa que hace que quieras verla muchas veces y de la cual nunca te vas a cansar, pero que aquí es como un producto sin alma, a final de cuentas intrascendente. Quiero aclarar que realmente no es una historia mala, es la misma que nos encanta, pero es como comer fruit loops con agua, sabes que el cereal sabe bien, pero que el sabor está diluido y que hay otra versión que es aún mejor que esta, solo que esperabas que te sorprendiera a pesar de que sabias que no lo haría.