RESEÑA – LA CRÓNICA FRANCESA

RESEÑA – LA CRÓNICA FRANCESA

09/11/2021 0 Por Oscar Velázquez

Desde la mente artística y visionaria Wes Anderson, LA CRÓNICA FRANCESA da vida a una colección de historias del último número de una revista estadounidense publicada en una ciudad francesa ficticia del siglo XX.

Con motivo de la muerte de su querido editor Arthur Howitzer, Jr., nacido en Kansas, el personal de La crónica Francesa, una revista estadounidense de amplia circulación con sede en la ciudad francesa de Ennui-sur-Blasé, se reúne para escribir su obituario.

Los recuerdos de Howitzer fluyen en la creación de cuatro historias:

•”The Cycling Reporter”, Un diario de viaje de las secciones más sórdidas de la ciudad:


•“The Concrete Masterpiece”, sobre un pintor criminalmente loco, su guardia y musa, y sus hambrientos marchantes:


•“Revisiones a un Manifiesto”, una crónica del amor y la muerte en las barricadas en el apogeo de la revuelta estudiantil:


“El comedor privado del comisionado de policía”, una historia llena de suspenso sobre drogas, secuestros y cenas elegantes.


La crónica francesa es muchas cosas: una abundancia de historias dentro de historias dentro de recuerdos que convergen en un todo orgánico, una galería de maravillas cinematográficas de todas las formas, tamaños y colores en constante movimiento dinámico, una carta de amor no solo a la palabra impresa en general, también al cine francés … ¿Por qué conformarse con un tipo de cine si puedes tener todos a la vez?, un viaje dentro de otro con mucho corazón y amor al arte. En pocas palabras: una película de Wes Anderson.

La crónica francesa no solo alude y glorifica al periodismo independiente, también es una carta de amor a todo lo bello del cine.

Anderson logro colocar en una película su visión por el buen cine que siempre ha tenido, se nota que su tiempo a través de Francia le a ayudado a poder plasmar sus cortas pero interesantes historias de la crónica francesa de una manera más que sublime.

Solo un elenco de primer nivel podría estar a la par de lo visual y artístico de esta cinta, es por eso que el cast elegido también es una muestra de las buenas decisiones que tomo para esta cinta.
La crónica francesa se trata del tipo de revista que al leer te llevaría a algún lugar pero realmente te daría una sensación de ese lugar: los olores, el sabor, el drama y el carácter, a través de las palabras de alguien con la capacidad de evocar imágenes en tu mente.

Si conoces el recorrido cinematográfico de Wes Anderson y te gustan sus obras, sin duda la crónica francesa te dejará encantado, si por el contrario eres un público más casual, que no está interesado por el lado mas artístico y profundo del cine, esta cinta puede llegar a ser algo pesada para ti, sobre todo por que el dinamismo no es algo que caracterice a esta cinta y un segundo de distracción podría hacer que te pierdas de la experiencia a la cuál te quiere sumergir la revista en sus diferentes segmentos.

Ninguna historia puede ser buena sin alguien que sepa contarla, y la forma en que se cuenta cada segmento de la revista es demasiado atrapante, cuatro historias sorprendentes, complejas, inmaculadamente elaboradas, ricamente detalladas, inesperadamente divertidas y aún más inesperadamente conmovedoras recopiladas en las páginas de una revista cuidadosamente elaborada: LA CRÓNICA FRANCESA

 Mas detalladamente en las páginas de la cinta podemos leer lo siguiente:

 

  • El recorrido de Sazerac (Owen Wilson) por la propia Ennui-sur-Blasé, una ciudad envejecida en una colina con sus antiguas torres de catedral, sus calles estrechas y empedradas que serpentean a través de hileras de estructuras de piedra envejecidas, sus encantos y degradaciones, con su vida nocturna y su baja vida, donde  todas las épocas parecen disolverse en la esencia atemporal de Francia, fluyendo como las aguas del cercano río Blasé.
  • “La obra maestra de Berenson”, en la que se descubre la obra del pintor criminalmente loco Moses Rosenthaler (Benicio del Toro), cuya obra maestra de años de realización, anticipada sin aliento, inspirada en su guardia de prisión y musa Simone (Léa Seydoux), se presenta con gran fanfarria a un mundo del arte impaciente,  incluido el renombrado coleccionista de arte de Kansas y probable comprador Upshur “Maw” Clampette.
  • “Revisiones de un Manifesto” de Krementz, un relato de primera mano de los agravios y las pasiones, políticas y sexuales, que llevan a la juventud románticamente desencantada de Ennui a ir a la guerra con sus amos adultos e iniciar una tumultuosa huelga general que lleva a el cierre de todo el país.  El héroe y la heroína carismáticos de Krementz son los líderes desventurados del movimiento, el soñador Zeffirelli (Timothée Chalamet) y la dura Juliette (Lyna Khoudri).
  • “El comedor privado del comisionado de policía” de Roebuck-Wright es un retrato asignado del legendario chef Nescaffier (Stephen Park), que sirve a gusto del comisario de Ennui-sur-Blasé, que inesperadamente explota en un una historia de suspenso trepidante y emocionante cuando un grupo de matones liderados por “El chófer” (Edward Norton) secuestran al amado hijo del comisario y protegido de la resolución de crímenes, Gigi y amenazan con matarlo a menos que los sindicatos locales del crimen se unan.

 Las diferencias de estas historias hacen que la película se sienta como todo en uno, mezclar demasiadas cosas buenas y servirlas en un cóctel muy agradable, que no necesita darte un sabor dominante cuando puedes tener todos los sabores a la vez.

Te recomiendo ampliamente esta película, recuerda que estrena en cines este 11 de noviembre.